En un mundo en el cual la inteligencia brilla por su ausencia, en el que no nos importa romper corazones y destrozar vidas a nuestro paso, en el que no nos preocupa que los osos polares naden con los delfines, pues al fin y al cabo nos vamos a morir y lo que le pase a los demás nos la toca; en el que somos crueles, egoístas, egocéntricos y vanidosos; en un lugar donde la bondad solo se encuentra en 7 de cada 30 personas y de cada una hay otras 100 que mueren de hambre. En un mundo como este, como el nuestro, lleno de países en guerra, lleno de personas que sufren, lleno de humo, de ruidos, de drogas, adicciones y esclavismo; todavía queda gente que busca un rayo de luz entre tanta nube, todavía quedan aquellos que luchan por que cada uno viva su mundo de una manera mejor.